Aquellos que no creen en el amor, abstenerse a leer lo siguiente. Muchas gracias.
"Mi situación actual parece lineal y sin problemas aparentes. Pero para llegar a donde estoy ahora (feliz al lado del hombre que amo), tuve que atravesar muchos obstáculos (desde engaños, mentiras, celos y dudas hasta terceros indeseados) y tuve que recorrer un largo camino de autoencuentro y de conocimiento de el hombre que ya he mencionado. Cuando me preguntan si valió la pena, no vacilo ni un segundo y respondo un firme SÍ.
A aquellos valientes que se arriesgaron por amor y dejaron atrás una vida completamente distinta para formar parte de una vida en pareja, (por supuesto, plena y satifactoria al cien por ciento), desde lo más profundo de mi ser los felicito. Es un paso importante; aunque para algunos sea simplemente un pequeño cambio de hábito.
A medida que el tiempo pasa (ya llevo con el hombre de mi vida 10 años), surgen otras dificultades, quizá muy distintas a las que aparecían en los primeros meses de noviazgo. Un punto importante a tratar en estos casos en la rutina, palabrita que nos da bastante miedo ¿Verdad? (no me lo nieguen). Con él no me aburro nunca, ya que nunca terminamos de conocer a las personas. Él es más que mi esposo; es mi amigo, mi amante, mi compañero... Tanto, que casi no alcanza el tiempo. ¿Cómo podría aburrirme?. El amor es infinito, tanto así que nunca se agota.
Para aquellos que todavía están dudando en dar el paso (para todos, no solo para los que planean formar una familia, si no para los jóvenes enamorados cuyos sueños todavía no incluyen semejantes acontecimientos, también) es muy recomendable poner en una balanza lo que "perdemos" y lo que ganamos. Pero más allá de eso mi consejo es; si te gusta, si realmente la pasas bien con él/ella (ya sea que hayan pasado tres meses o un año), si la compañía de otro/a no se siente como la compañía de esa persona, si cuando salen una noche no pueden dejar de pensar en él/ella... ¡No dejen pasar la oportunidad! A veces por miedo dejamos que buenas oportunidades de ser felices (SI, ser felices, porque estar con la persona que a uno le gusta no implica aburrirse o abandonar la "libertad") se nos escapen de la mano... Y siempre, (créanme), nos terminamos arrepintiendo.
Cualquier cosa ya saben, existe el divorcio o un simple "no sos vos, soy yo".
Buena suerte!"
Let it be!